sábado, 24 de octubre de 2020

"PROFE, YO TENGO UNA FRASE..."

"Ánimo, tú puedes", "Eres valiente", "Eres más fuerte de lo que crees", "Nunca te rindas",..., son algunos de los mensajes de nuestros alumnos/as con los que comenzábamos esta actividad con el objetivo de crear conciencia y sumarnos a esta iniciativa en el día internacional de la lucha contra el cáncer de mama. Así, el profesorado de Religión del Centro, en los grupos de 1º ESO B-D-E-F-I, 2º ESO A-B-C-E y 1º PMAR, que imaparten clase, quisieron apoyar y dar visiblidad este día con mensajes de esperanza.
 
La sorpresa fue mayúscula, y es que los alumnos/as son maravillosos y nosotros muy afortunados por poder acompañarles en este preciso momento de su historia. La delicadeza al escribir sus mensajes de esperanza, sus reflexiones y aportaciones, su buen hacer para que las personas que lo reciban no se sientan solas, hicieron de lo que parecía una simple actividad algo muy humano y cercano.
 
Sin embargo, en un grupo, en el momento de plantearles la actividad, hubo una frase tan real como dura, tan esperanzadora como desagarradora y es que "Profe, yo tengo una frase. En mi familia hemos pasado por esto". Una alumna que había visto en primera persona esta dura ralidad. Ella lo vio y, lo vivió. Pero también ella lo vio superar.
 
Tal vez este sea el mensaje de esperanza que a mi me queda después de una semana de trabajo con ellos/as. Una frase tan esperanzadora y a la vez tan dura. El rostro de alguien, que con los ojos vidriosos por aquello que había visto y con el corazón abierto de lo que había visto superar, quería dar esa palabra de aliento a todas aquellas personas que lean su mensaje. Un mensaje de luchas y caídas, de lágrimas y de sonrisas, de noches oscuras y amaneceres vivos.
 
Y es que se mensaje nos habla de lo que supone vivir, luchar, vencer, ser constantes y de mantener la fe.
 
Ese fue su mensaje, ¿cuál va a ser el tuyo?